Me gritó algo.
Creo que era, puta, ¡sí, sí, era eso
lo sé porque lo repitió cincuenta veces
por lo menos.
Y de vez en cuando añadía un vaticinio al adjetivo:
- ¡Te voy a matar!.
Uno de sus arrebatos
pensé yo mientras sentía navegar
sus manos tiernamente
alrededor de mi cuello.
Luego, siguió diciendo puta, y puta, y puta
cada vez más tenue, más tenue, más tenue.
Todo eso lo recuerdo vagamente
mientras los peces
mordisquean
perezosamente
mis cenizas.
flotantes.
Música para una banda sonora vital: J. F. K.: Caso abierto (J. F. K.,
Oliver Stone, 1991)
-
John Williams pone la banda sonora a este minucioso y absorbente thriller
judicial sobre el caso real de Jim Garrison, fiscal de Nueva Orleans que
reabrió ...
Hace 1 día
10 comentarios:
Es curioso, amigo Pepe, cómo este tipo de poesías yo no las considero poesías. Creo que ésta ya la expusiste alguna vez en la Trinchera. Y lo cierto es que me gustó mucho y me sigue gustando mucho. Más que nada por la sorpresa final. En el fondo antes que poesía es relato. Lo que quiero decir es que la única diferencia de éste poema con un relato es su disposición en verso. Últimamente me encuentro con muchas poesías que bien podrían ser relatos y que en lo único en que se diferencian de éstos es en su forma sobre el folio. A mi parecer no es suficiente con pasarlo de prosa a verso... Es una simple opinión, primo. Igual aquí hay un debate. Salud
La verdad es que desde que nació el versolibrismo a veces lo que a algunos puede parecerle un relato es una poesía para el escritor y para otros.
Yo que le doy mucho al verso libre, tengo que decir que para mí si es un poema.Ahí tenemos a muchos de los grandes, Carlos Edmundo de Ory, Antonio Fernández Molina...en el mismo estilo.
Besitos Child.
Para mi un poema siempre es un relato.Por definición.
Pero está claro que no todos los relatos son poemas, yo creo que eso ya depende de la forma del texto y del autor, de lo que sienta anímicamente al crearlo y de lo que interprete el lector al leerlo.
Otra cosa es que haya mucha poesía vacía, o tan personal que sólo la entiende la persona que la ha escrito.
Oye Pepe, le has cambiao el sexo a la Fernanda de Utrera, te lo puse en el post correspondiente pero supongo q no lo has visto.
Un abrazo.
Pakito Gas
Sí, hace tiempo lo colgué en la trinchera, Child. Creo que me salió un poema narrativo, o un pastiche, o un homenaje, o un antipoema, o un microrelato. No me hagas ponerme pedante, ¡coño!.
Carlos Edmundo de Ory, está siempre en mi zurrón, Sagrario. Una pequeña antología que me regaló Mariano Ibeas que consulto con frecuencia.
Maria de O, Fernando de la A.
Si, Paquito, puse una O donde procedía una A. FERNANDA DE UTRERA, por soleares la mejor solearista en la historia del flamenco. Muy bien puntualizado. Es lo mismo que si tú hubieras escrito, Agustino de Aragón.
Hay poesía en la paradoja de una vida que se escurre entre los dedos del violento porque la víctima ya es ceniza en sus manos antes de serlo.
Bello y siniestro.
M.Albéniz
paso a desearte un 2008 aireado y lleno de buenas sensaciones...y que todas estas que te cogen del cuello te traten mejor...abrazos.
¡Hey, has puesto biografía aquí a la derecha!
A mí también me gusta lo que escribes, hay muy poca gente que sepa meter ironía sin que se estropee la calidad final del texto.
Cada vez que leo a Gil de Biedma, aunque sólo sea su nombre, me entra como un escalofrío... ¿Sabes que van a estrenar dentro de poco una peli sobre su vida basada en la biografía que hizo Dalmau?
Caramba, M.Albéniz, mola ese análisis crítico.
Gracias, Fernando, espero que anoche el Mar de Dios no te prudujera una resaca insuperable, yo de las sevillanas guardo un crujido en las lumbares.
Habrá que ver esa peli, Ub. Gil de Biezma no deja de sorprender. Me gusta gustarte.
Anda hermoso, si no es mucho currito mete alguna foto de esos precioso árboles que vestimos a medias, de esos arboles-ecos.Perdí toda la información en una putadita del ordenador.
Sagrario.
Tus deseos son órdenes mon amour, me pongo a buscar en mi arrinconado portátil que funciona cual escopeta de feria. Algo encontraré para trasladarlo aquí, columnita.
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